El suribachi es un mortero de origen japonés. Está hecho de cerámica y su interior está lleno de pequeñas ranuras para triturar mejor las semillas de sésamo con las que se prepara el gomasio, un condimento muy usado en la macrobiótica, que tiene muchas propiedades.
De todas formas, es perfecto para moler o triturar cualquier semilla o especias. Al arrastrar por la pared del mortero las especias, éstas sueltan todo su aroma y luego será más sencillo añadirlas a nuestros platos.
Otra curiosidad sobre este utensilio es el palo de madera que se usa para moler los alimentos, conocido como surigoki. Suele estár hecho de ciprés o fresno y si es de más calidad, será del árbol de pimienta Sansho, lo que le dará a la molienda un toque aún más especial.
Hay varios tamaños y precios. Desde 14 euros puedes hacerte con un suribachi. Lo encontrarás en tiendas especializadas de dietética, en supermercados de productos ecológicos y si no, cómo no, en Internet.