Tengo que advertirte de que la Navidad no es mágica o al menos no lo es para quienes comen más grasas en cuatro días festivos que en todo el año.
Juntarte con tu familia y celebrar que estáis juntos y que estáis bien es algo bonito (evita hablar de política y todo irá mejor) pero la mayoría de las veces se come de más y se bebe también en exceso.
Parece que no hay fiesta que se precie sin banquete de por medio, ¿verdad?
Las verduras son las grandes olvidadas de estas fiestas. Quizás si les pusieran un lazo rojo en las tiendas, la gente levantaría la vista de la estantería de los turrones y posaría su nariz en el vergel del establecimiento.
Pero en serio, ¿necesitas que te envuelvan en celofán un brócoli para querer ponerlo en tu mesa de Navidad?