Lasaña de champiñones

Me encanta el color de estas rosas...y la lasaña...ni te cuento¡¡¡

Me encanta el color de estas rosas y el sabor de la lasaña…ni te cuento¡¡¡

Cuando alguien cocina para ti con amor y con dedicación eso se nota. No hace falta que vayas a un tres estrellas michelin ni que el menú te cueste un ojo de la cara. Al primer bocado lo detectas. Tampoco tienes que ser un gourmet avezado, es cuestión de paladear la comida y de saborearla. Sólo con ver la presentación de la mesa también tienes unas cuantas pistas. Si hay flores frescas…la cosa promete.

No me acuerdo de la presentación de la mesa cuando mi abuela cocinaba para sus nietas, incluida yo, y para el resto de la familia pero sí que guardo un recuerdo exquisito de ella como cocinera y «jefa» de la «saga» Molinuevo.

He conservado algunos de sus pucheros de cocina y estoy ansiosa por usarlos. Ahora no puedo hacerlo porque mi fuego es tan «moderno» que no detecta lo auténtico. Espero hacerlo muy pronto y tiendo a pensar que evocaré su buena mano con las ollas y los fuegos, aunque eso ya se verá porque mi abuela Leoncia era una gran chef y eso que no publicó libros de cocina ni tuvo un blog gastronómicó ni mucho menos un restaurante.

No es la única en mi familia que deleitó a sus seres queridos con su buen hacer en la cocina. Mi otra abuela, Nicolasa, a la que no tuve la suerte de conocer, también era una delicia cocinando.

Las dos eran artesanas de lo que hoy se conoce como «slow food», que no es otra cosa que la cocina de toda la vida, la que se hacía con paciencia, con amor y sin mirar al reloj.

Me siento conectada con esa energía, con la de mis abuelas «nutridoras» de toda la familia, y hago mis pinitos con la cocina energética y/o macrobiótica que considero que es una versión mejorada de lo que esas grandes mujeres de mi familia hacían hace años con los escasos ingredientes que tenían a mano.

Mi madre también tiene buena culpa de que yo tenga tanto amor por la cocina, ella me ha transmitido el gusto por la comida y por las sobremesas, un aspecto muy característico de los vascos por cierto.

Aprovecho este post para agradecer a mi madre, Piedad, y a mis abuelas Leoncia y Nicolasa, ese don tan bonito que me hace vibrar y que me hace pensar en grandes mujeres de antes y de ahora.

Y si queréis saber cómo he hecho esta lasaña, no tiene mucho misterio. Bueno sí, mucho amor, un ingrediente que es gratis pero que no abunda. Y ahora al lío.

Ingredientes: láminas de lasaña vegetal integral+ 1 cebolla + champiñones + un puñado de gambas + leche de coco + sal +albahaca fresca+ aceite + almendras

Elaboración: Cueces las láminas de lasaña vegetal 5 o 7 minutos con un poco de sal  en agua hirviendo. El tiempo que indique el paquete. Reservas el agua de cocción.

Cortas una cebolla fina y la pochas con aceite y sal durante 15 minutos. Limpias unos champiñones con papel de cocina y con un cuchillo, para quitarles bien los restos de tierra y los echas en la sartén junto con la cebolla cuando ya esté blandita. Agregas otro poquito de sal y lo dejas que se haga junto otros 10 o 15 minutos. Añades un chorrito de leche de coco y dejas que se evapore el líquido mientras se hace lentamente sin tapa.

Añades las gambas y la albahaca cortada finita y lo haces 3 minutos más, hasta que no quede nada de líquido.

Pincelas con aceite una bandeja de horno y colocas encima las tiras de lasaña. Una vez cocinadas las gambas con los champiñones y la cebolla, apagas el fuego y con una cuchara, rellenas la lasaña. Pones encima otra capa de lasaña vegetal integral y lo cubres con una besamel vegana y unas almendras trituradas o molidas.

Lo gratinas en el horno 30 minutos y estará deliciosa¡¡¡

Besamel vegana:  1 cebolla pochada con sal + flores de coliflor + cubrirlo (no del todo) con el agua de la cocción de la lasaña + una pizca de sal + un toque de nuez moscada. Batir y si queda muy espeso aligerar con leche vegetal y volver a batir.

 

 

 

 

Un comentario

  1. sugarnobaby Autor del artículo

    Hola Marisa, a un lado de la lasaña he puesto una ensalada prensada de lombarda y zanahoria y en el otro un bistec de tofu con hierbas aromáticas.
    Muchas gracias y un abrazo!!

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