Autor: Natsuno Itsigo

El mes de enero es el mejor del año para ponerse manos a la obra y ordenar la casa

Tener una casa ordenada y bonita es fundamental si quieres que lleguen a tu vida energías positivas. El caos y el desorden no permiten que la energía fluya y en casas caóticas, ésta se acaba estancando.

Un armario ropero atestado de ropa que no usamos hace años pero que guardamos por si algún día nos la ponemos es una zona con Qi estancado.

El «por si» y el «puede» equivalen a «nunca», así que no te hagas trampas al solitario

El desorden que tienes en casa influye en tu vida de manera directa y bloquea facetas importantes (negocios, trabajo, salud, dinero, amor…). Así que merece que le prestes atención.

Además, si quieres que entren cosas nuevas en tu vida, hay una regla de oro que debes saber, deja salir aquellas que ya no te sirven y las nuevas vendrán por sí mismas. Imagina que ordenar tu habitación o tu despacho es una terapia personal regeneradora que atraerá nuevas influencias y proyectos a tu vida, y sin gastar un euro.

Además, te ayudará a solucionar asuntos enquistados, para los que no encuentras salida.

Ordenar tu casa Incluso te puede ayudar a finiquitar deudas

Si además tienes un negocio o un proyecto y trabajas en él desde casa, ponte manos a la obra ya, porque ni te imaginas lo que influye tener el despacho ordenado, limpio y bonito.

Para empezar, sentarte en una zona de trabajo así te hace más productiva, pero es que la creatividad también parece fluir mejor y la economía mejora. Así que… no te lo pienses más y empieza desde ya a poner tu casa a punto para un 2016 de cambios.

Si quieres que 2016 sea un año próspero para ti dale la bienvenida como se merece

5 Remedios infalibles para quienes se apegan a las cosas:

1. Cuando te veas frente a frente con ese abrigo de hace 10 años que te resistes a «tirar», pregúntate si te lo pondrás mañana o el fin de semana. Si la respuesta es que no, dale las gracias por haberte abrigado durante muchos inviernos y jubílalo de una puñetera vez.
2. No guardes ropa que no te sienta bien, donála a quien pueda lucirla y disfrutarla.
3. Deshazte de todo lo que no te haga feliz en este momento (el pasado no cuenta).
4. Guardar las cosas que ya no usas debajo de la cama o en el trastero no es hacer limpieza. Que tú no las veas no significa que no sigan acumulando polvo.
5. No tires nada, regálalo a gente a la que le pueda gustar y lo pueda usar. Si piensas que alguien pagaría por ello, véndelo.

Quien sabe de «La magia del orden» es Marie Kondo,  una japonesa que ha vendido millones de libros diciendo cosas como ésta:

“Cuando te topes con algo de lo que no puedes desprenderte piensa con cuidado sobre su verdadero propósito en tu vida. Te sorprenderá cuántas cosas que posees ya cumplieron su función. Al reconocer su contribución y dejarlas ir con gratitud, serás capaz de poner en verdadero orden las cosas que posees y toda tu vida”.

Sus vídeos hacen furor en youtube.

La filosofía de Marie Kondo es una sacudida de polvo en toda regla y hará que te lo pienses dos veces la próxima vez que guardes tus calcetines hechos una pelota en el cajón.

En el «universo Kondiano» las casas están limpias, ordenadas y los objetos y las cosas se tratan bien, incluso los calcetines, porque el tiempo que están en el cajón están descansando y se merecen lo mejor después de haberte acompañado de manera incansable allá por donde quiera que vayas.

Ahora que sabes algo más sobre casas sanas, objetos felices y propietarios que aún lo son más, ¿por dónde te propones empezar?