Las margaritas de botón son alucinantes y esa rosa que no es una rosa me deja hipnotizada

La primavera es una de mis estaciones favoritas, como lo es para millones de personas en el mundo, incluida tú, muy probablemente.

El invierno suele ser una época dura para mí y cuando llega la primavera la recibo con las puertas de mi casa abiertas de par en par.

Empatizo totalmente con los árboles y las plantas, que resurgen de su letargo invernal y se abren a la nueva energía mostrando sus frutos o sus flores.

Yo no tengo ramas por las que dar señales de vida pero dentro de mí también hay signos de que la energía que ha estado estancada en el invierno, fluye hacia arriba y nuevas ideas y proyectos brotan.

Puesto que vivo en una zona fría, en la que los inviernos son inviernos sin medias tintas, he seguido una alimentación yang, con la que he buscado calentarme y nutrirme para soportar lo mejor posible las nevadas, las bajas temperaturas y los días interminables de lluvia.

Pero sé que no puedo seguir alimentándome como si hubiera cinco bajo cero en la calle porque entonces me sentiré mal.

Ahora necesito, igual que tú, ayudar a mi hígado a limpiarse y a depurarse. Es su momento, debes ayudarle. Él trabaja silenciosamente los 365 días del año para ti, así que premia su dedicación y hazte de paso un favor.

Quizás no lo sepas pero es uno de los órganos más importantes de nuestro cuerpo. Se ocupa de decenas de tareas que son fundamentales para que mantengamos la salud.

Por ejemplo, si bebes alcohol o tomas medicamentos, ¿sabes que tu hígado los procesa para que los puedas eliminar por la orina? Además, elimina las impurezas de la sangre, almacena hierro y vitaminas, controla los niveles de azúcar en la sangre…

Tu hígado es tu aliado principal en la depuración de tóxicos, además se ocupa de metabolizar glúcidos, lípidos y proteínas, y por si todo eso fuera poco, almacena vitaminas y energía en forma de azúcar, que luego pondrá a tu disposición cuando la necesites.

Así que, ¿qué tal si le echas un cable? ¿No sabes cómo? Yo te doy algunas ideas.

10 pasos para depurarte en primavera

1/Antes de cocinar los cereales (arroz, mijo…), ponlos a remojo unas horas y no uses la olla a presión para cocinarlos porque es una forma de cocinar muy invernal y ahora hace falta que sea más ligera.

2/Suprime la carne de tu dieta (salvo embarazadas, niños y deportistas), baja el consumo de proteína y cocínala de forma más liviana.

3/Reduce el uso de condimentos salados (tamari, shoyu), los fritos, las harinas y los horneados.

4/Come verduras variadas pero sobre todo apóyate en las que te ayudan a depurar: ortigas, rabanitos con sus hojas, puerros, alcachofas, apio, pickles, berros…

5/Toma en ayunas un vasito de agua templada con un chorrito de limón exprimido.

6/Decora con hierbas aromáticas frescas tus platos (perejil, cilantro, hierbabuena, menta, cebollino…).

7/Aligera tu forma de cocinar y abusa sin miedo de los hervidos, de las cocciones al vapor, de los escaldados y de los salteados cortos. Añade también germinados en pequeñas cantidades.

8/No te olvides de cocinar platos con algas. Las que mejor te van en primavera son wakame, arame, lechuga de mar, nori, kombu, dulce…

9/Reduce el uso de aceite en tu cocina.

10/Sigue tomando sopitas pero más ligeras y con más cantidad de verdura que en invierno.

Si sigues estos consejos seguramente tendrás una primavera más feliz, con menos alergias y sin el cansancio típico que algunas personas sufren en esta estación, así que no te lo pienses más y a por ello.